Tesla realiza la primera entrega de un Model Y sin conductor en vías públicas en Austin, marcando un avance en la movilidad autónoma
Tesla realiza un avance revolucionario en movilidad autónoma con la primera entrega de un Model Y sin conductor en vías públicas en Austin.

El CEO de Tesla, Elon Musk, anunció que la compañía realizó la primera entrega de un Model Y sin conductor en Austin, Texas, el 27 de junio. La entrega incluyó un recorrido completo por vías públicas, incluyendo autopistas y calles residenciales, sin presencia humana en la cabina ni control remoto, lo que marca un hito en la historia de la movilidad autónoma. La compañía compartió un vídeo en la red social X que muestra el vehículo circulando de forma autónoma, aunque no precisó qué versión del hardware y software se utilizó ni cuándo estará disponible para el público en general.
Según el manual del propietario de Tesla, para usar la opción Full Self-Driving (Supervised), los conductores deben mantener las manos en el volante y estar preparados para intervenir en cualquier momento. Sin embargo, en el vídeo difundido se observa al Model Y operando sin conductor, en una ruta que incluye autopistas, calles residenciales y zonas de aparcamiento, con el fin de entregar el vehículo a un cliente frente a un edificio de apartamentos en Austin. La entrega se realizó con un equipo de empleados de Tesla presentes, algunos con camisetas con el logo de la compañía, cerca de una fila pintada en rojo que indica una zona de no detención para emergencias.
Este avance se produce en medio de una investigación por parte de la Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en Carreteras (NHTSA), que estudia posibles fallos en los sistemas de conducción autónoma de Tesla tras detectar incumplimientos de normas de tránsito durante pruebas y despliegues recientes. Elon Musk afirmó en su cuenta en X que esta fue «la primera entrega plenamente autónoma de un Tesla desde la fábrica hasta la casa del cliente en todo el distrito», aunque esa afirmación no es del todo exacta. Empresas como Waymo, propiedad de Alphabet, ya operan desde 2024 servicios de robotaxi completamente autónomos en Phoenix y han expandido estas operaciones a Los Ángeles y San Francisco, en una fase comercial establecida.
La compañía también ha iniciado un programa piloto de robotaxis en Austin con entre 10 y 20 vehículos, previo a un despliegue comercial más amplio aún sin detalles específicos. Este servicio está disponible solo para invitados, principalmente influencers y analistas que generan contenido en plataformas como X y YouTube. Estas unidades cuentan con un supervisor humano a bordo en el asiento del pasajero y son controladas de forma remota desde un centro de operaciones.
Desde 2016, Elon Musk ha prometido que todos los vehículos eléctricos de Tesla podrían convertirse en robots autónomos mediante actualizaciones de software inalámbricas, con la visión de que los propietarios puedan incluir sus coches en una flota compartida que generaría ingresos mientras no los utilizan. A pesar de estas promesas, Tesla aún no ha cumplido con estos compromisos a gran escala, y la entrega sin conductor en Texas ha aumentado las expectativas y la atención sobre las capacidades autónomas de la firma.
Mientras tanto, Tesla afronta una batalla contra la percepción pública, afectada por declaraciones polémicas de Musk, su apoyo a partidos extremos y su colaboración con administraciones políticas. Esto ha contribuido a una caída en las ventas en mercados clave, especialmente en Europa, y a una creciente competencia en el sector de vehículos eléctricos, con empresas chinas como BYD, Nio y Xiaomi que ofrecen modelos más asequibles y tecnología avanzada. La compañía tiene previsto divulgar sus datos de producción y entrega del segundo trimestre el 2 de julio, en un contexto de desafíos internos y del mercado internacional.