Modelos de inteligencia artificial pronostican el draft de la NFL 2025 con resultados divergentes y limitaciones en la predicción
Diversos modelos de inteligencia artificial intentaron predecir las selecciones del draft 2025, mostrando resultados variables y evidenciando sus limitaciones en análisis deportivos.

El draft de la NFL para 2025 se celebró en abril, con siete rondas y un total de 32 selecciones, en un evento que genera gran expectativa tanto para los aficionados como para los equipos que buscan reforzar sus plantillas para la próxima temporada. En esta ocasión, la predicción de los primeros picks fue realizada por tres modelos de inteligencia artificial: ChatGPT, Gemini y Manus, cada uno con sus particularidades y niveles de precisión.
Estos modelos comenzaron a compilar sus predicciones casi de inmediato, aunque se evidencian diferencias significativas en los resultados. Los pronósticos mostraron cierta coherencia al coincidir en que Cam Ward sería la elección número uno, pero surgieron divergencias importantes en las demás posiciones, así como en las selecciones potenciales de jugadores específicos. Por ejemplo, en las predicciones, Shedeur Sanders aparece en tercer lugar según ChatGPT, mientras que en Gemini figura en la posición 21, lo que refleja una alta variabilidad en las proyecciones.
Una de las particularidades más llamativas es que el modelo Manus incluyó en sus predicciones jugadores que actualmente participan en la NFL desde años anteriores, lo cual generó errores desde el inicio. Esto evidencia algunas incoherencias en sus análisis y la dificultad de anticipar cambios en las plantillas y posibles intercambios durante el draft real, ya que dichos movimientos no pueden ser previstos con precisión por las inteligencias artificiales.
Al analizar las predicciones, se observa que la variedad en los posicionamientos de jugadores de alto perfil, como Shedeur Sanders, será un dato clave para evaluar la precisión de estos modelos en comparación con los resultados finales. Los cambios en las selecciones y las negociaciones entre equipos el día del draft son factores que también influyen en el resultado final, dificultando aún más el uso exclusivo de IA para predicciones exactas.
Finalmente, tras la realización del draft, analistas y seguidores del fútbol americano estarán atentos a los resultados para determinar qué modelo de IA logró predecir mejor las selecciones, teniendo en cuenta la alta variabilidad y los imprevistos presentes en la dinámica real del evento. Esto abrirá un debate sobre la utilidad y los límites de la inteligencia artificial en predicciones deportivas de alto impacto.