El emoji de caballito de mar no formó parte del estándar oficial de Unicode, según análisis y búsquedas en redes sociales
El debate sobre la existencia del emoji de caballito de mar revela cómo la memoria colectiva y los estándares oficiales difieren en la era digital.
La existencia del emoji de caballito de mar ha generado un largo debate en redes sociales como Reddit y TikTok, donde algunos usuarios aseguran que alguna vez existió, mientras otros sostienen que nunca fue oficial. Sin embargo, las búsquedas y análisis sugieren que no hay evidencia concreta de que dicho emoji haya formado parte del estándar oficial de Unicode, por lo que se concluye que nunca existió oficialmente.
El caso pone en evidencia un fenómeno conocido como efecto Mandela, que explica cómo muchas personas recuerdan de manera errónea hechos históricos o detalles culturales. Ejemplos clásicos incluyen la creencia de la muerte de Nelson Mandela en la década de 1980, cuando en realidad falleció en 2013, o la frase «Luke, yo soy tu padre» en la saga de Star Wars, que en realidad fue: «No, yo soy tu padre».
Las inteligencias artificiales como GPT-5 y Claude también intentan encontrar o crear un emoji del caballito de mar, pero en realidad no existe. Estos modelos tienden a hallucinar o generar imágenes similares mediante combinaciones de animales acuáticos o criaturas fantásticas para aproximarse a la respuesta. Esto revela cómo la IA puede confundir la memoria colectiva con la creatividad, generando contenido que no corresponde con la realidad.
En el caso específico del emoji de caballito de mar, tanto GPT-5 como otros modelos intentan «hallucinar» o aproximar la respuesta mediante combinaciones visuales, ya que no hay evidencia de su existencia en los estándares de emojis. Finalmente, GPT-5 sugiere que, ante la ausencia de dicho emoji, la mejor opción sería combinar otros elementos relacionados, aunque esto no implica que el emoji haya sido oficial alguna vez. La confusión y las búsquedas en redes sociales continúan evidenciando que, en este caso, la imaginación y la memoria errónea prevalecen sobre la realidad oficial.