Expertos advierten sobre los riesgos de depender demasiado de ChatGPT y destacan la importancia del juicio humano
El uso creciente de ChatGPT plantea dudas sobre los límites y riesgos de confiar excesivamente en esta inteligencia artificial en decisiones cotidianas.
Cada vez más personas recurren a ChatGPT para resolver problemas cotidianos, como buscar recetas de cocina, reseñas de películas o los mejores productos low cost para el cuidado facial, lo que ha impulsado el crecimiento y éxito de OpenAI. Sin embargo, surge la pregunta de si es recomendable depender completamente de esta inteligencia artificial. Sam Altman, director ejecutivo de OpenAI, advirtió sobre los riesgos de confiar demasiado en la IA para la toma de decisiones, señalando que, aunque los consejos sean buenos, la dependencia excesiva puede hacer que se pierdan aspectos importantes. Altman subrayó que la IA aún no ofrece recomendaciones perfectas, pero que las personas seguirán consultándola para definir sus metas y resolver dudas, confiando en que la autonomía humana no desaparecerá, ya que la decisión final siempre recae en el usuario.
La semana pasada, OpenAI lanzó GPT-5, una nueva versión de ChatGPT que destaca por su mayor velocidad, precisión y capacidades en programación y análisis médico. A diferencia de GPT-4, que presentaba una comunicación similar a la de un estudiante universitario, GPT-5 ofrece un nivel de competencia equivalente al de un especialista con doctorado en diversas áreas, acercándose a un rendimiento comparable al de profesionales altamente cualificados. Además, GPT-5 puede utilizarse de forma gratuita, sin necesidad de pagar suscripción, lo que facilita su acceso a millones de personas en todo el mundo, alcanzando más de 700 millones de usuarios semanales.
Desde su lanzamiento en 2022, la inteligencia artificial de OpenAI ha sido bien recibida y adoptada por todo tipo de usuarios, desde estudiantes hasta profesionales. Sin embargo, sigue vigente el debate sobre si la ciudadanía terminará dominando o siendo dominada por estas tecnologías. En este contexto, OpenAI compite con empresas como Anthropic, Google y Meta, que también apuestan por la innovación y la captación de usuarios en el mercado de la inteligencia artificial.
Por su parte, Altman destacó que, aunque recortar gastos podría acelerar las ganancias, la estrategia de OpenAI continúa enfocada en invertir en infraestructura, con planes de destinar cientos de miles de millones de euros € en centros de datos para potenciar el desarrollo de la IA. En el contexto del auge tecnológico, subrayó la importancia de que las personas aprendan a ser más independientes y críticas en el uso de estas herramientas, ya que depender excesivamente de la inteligencia artificial puede disminuir habilidades como la lectura y el pensamiento crítico. Por ello, se enfatiza la necesidad de utilizar la IA con criterio y lógica para desarrollar y potenciar las capacidades intelectuales propias.