OpenAI presenta SDK de aplicaciones y transforma ChatGPT en un sistema operativo con ecosistema de aplicaciones y pagos integrados
OpenAI anuncia una plataforma que convierte a ChatGPT en un sistema operativo con ecosistema, aplicaciones integradas y transacciones directas para usuarios y desarrolladores.
OpenAI anunció en su evento DevDay 2025, celebrado en San Francisco el 6 de octubre, una innovadora plataforma llamada SDK de aplicaciones, que convierte a ChatGPT en un sistema operativo con funciones de superapp y ecosistema para aplicaciones de terceros. Con esta iniciativa, ChatGPT deja de ser solo un asistente conversacional para transformarse en una plataforma integral capaz de gestionar múltiples servicios, integrándose de forma fluida en la experiencia del usuario.
Este avance permite a las personas usuarias invocar aplicaciones mediante comandos en lenguaje natural, como «Spotify, crea una lista de reproducción para mi fiesta» o «Zillow, busca apartamentos en Tokio por menos de $3.000», sin necesidad de salir de la interfaz de ChatGPT. Entre los partners ya integrados en este ecosistema están Spotify, Canva, Zillow, Figma, Coursera, Expedia y Booking.com, que demuestran la capacidad de incorporar componentes interactivos como mapas, listas de reproducción, herramientas de diseño y contenidos de vídeo directamente en el chat.
El SDK está basado en el Modelo de Protocolo de Contexto (MCP), que facilita a los desarrolladores el acceso directo a la base de usuarios de OpenAI sin depender de modelos tradicionales de distribución. Según explicó Sam Altman durante el evento, esta estrategia permite crear aplicaciones «interactivas, adaptativas y personalizadas» que pueden gestionarse y utilizarse mediante conversación natural.
Además, OpenAI presentó el Protocolo de Comercio con Agentes (ACP), desarrollado junto a Stripe, que integra pagos y procesos de pago en las aplicaciones dentro de ChatGPT. Esta funcionalidad cubre un vacío importante en el ecosistema, permitiendo transacciones y compras directas desde la plataforma, una característica clave que diferencia esta propuesta de otras soluciones de inteligencia artificial.
Desde el punto de vista técnico, OpenAI concibe a ChatGPT como un sistema operativo, donde el modelo GPT actúa como núcleo, gestionando los recursos de razonamiento y procesamiento del lenguaje; las APIs funcionan como llamadas al sistema; la interfaz, como shell; y el marketplace será el directorio central donde las personas usuarias podrán descubrir y activar nuevas aplicaciones. Esta arquitectura permitirá a OpenAI gobernar el ecosistema, definir estándares y monetizar las aplicaciones, creando un mercado de doble vertiente que potenciará un efecto de crecimiento mediante la atracción de desarrolladores y usuarios.
Es importante destacar la estrategia diferenciada frente a competidores como Google, Perplexity y Microsoft. Google busca potenciar Chrome con capacidades de Gemini en un enfoque que mejora el navegador como capa de inteligencia, mientras que Perplexity se especializa en motores de búsqueda con respuestas verificadas y citadas, aunque a menor escala. Por su parte, Microsoft, pese a invertir en esta plataforma, continúa integrando inteligencia artificial en su ecosistema Office, Windows y Azure, priorizando la expansión en productos ya existentes en lugar de crear un sistema operativo IA centrado en ChatGPT.
El concepto de «ChatGPT como sistema operativo» no es solo una metáfora, sino que refleja una estrategia estructurada para establecer a ChatGPT como el principal portal de acceso a servicios digitales. Desde el núcleo, donde las capacidades del modelo gestionan el razonamiento y el lenguaje, hasta la interfaz, que será la shell, y el marketplace, este ecosistema busca consolidar a OpenAI como gestor principal del universo de aplicaciones en el entorno conversacional.
Además, el lanzamiento del marketplace y las herramientas para desarrolladores sugiere una intención de monetización, permitiendo a terceros obtener ingresos por sus aplicaciones, en un modelo similar al de Apple o Google. Con cerca de 800 millones de usuarios semanales, OpenAI busca crear una rueda giratoria en la que más desarrolladores atraigan a más usuarios, haciendo la plataforma más valiosa y útil, y consolidando su papel como dueño del ecosistema digital basado en IA.
Por último, la relación con Microsoft presenta un escenario de competencia y colaboración. Aunque trabajan conjuntamente, Microsoft continúa fortaleciendo su propia oferta de IA en productos como Microsoft 365 y Azure, generando una dinámica de «co-opetition» en la que cada parte busca defender su liderazgo. La apuesta de OpenAI por construir su plataforma independiente responde a la necesidad de no ser solo un proveedor de modelos, sino de controlar el acceso directo a las personas usuarias y desarrolladoras, asegurando así su autonomía y posición en la futura computación IA-native.