OpenAI transforma ChatGPT en una plataforma de aplicaciones conversacionales integradas y contextuales

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OpenAI transforma ChatGPT en una plataforma de aplicaciones conversacionales integradas y contextuales

OpenAI convierte ChatGPT en una plataforma adaptable que integra aplicaciones de terceros, facilitando acciones automáticas y contextualizadas en cada conversación.

Descripción

OpenAI está transformando ChatGPT en una plataforma completa llena de aplicaciones, yendo mucho más allá del simple chatbot tradicional. La nueva función convierte a ChatGPT en una tienda de aplicaciones conversacional con implicaciones significativas en la forma en que las personas interactúan con esta herramienta.

Desde hace un tiempo, ChatGPT ha avanzado hacia un enfoque más proactivo para responder a las solicitudes de la ciudadanía, pero la incorporación de aplicaciones de terceros, proporcionadas por empresas como Booking.com, Canva, Coursera, Expedia, Figma, Spotify y Zillow, permite que los usuarios mencionen una tarea en el chat y ChatGPT pueda consultar los servicios relevantes sin necesidad de hacer clic en enlaces o abrir otras plataformas. Por ejemplo, se puede solicitar una lista de reproducción en Spotify o generar una publicación inmobiliaria en Zillow, y ChatGPT configurará todo automáticamente en dichas plataformas.

Además, no es necesario especificar qué aplicación se desea usar. Si se menciona estar planificando un viaje, ChatGPT puede sugerir las aplicaciones de Expedia o Booking.com. Si la consulta está relacionada con diseño gráfico, probablemente aparecerá Figma como una opción. Esto convierte a ChatGPT en un centro de mando donde las conversaciones se traducen en acciones con un solo comando.

La comparación más cercana sería con los albores de las tiendas de aplicaciones en los smartphones, aunque en este caso las aplicaciones llegan en función del contexto de la conversación, sin necesidad de abrir manualmente cada una. La aplicación se incorpora a la conversación, facilitando una interacción más fluida y natural.

Este cambio también representa una estrategia de control por parte de OpenAI, que ahora puede gestionar qué aplicaciones aparecen en ChatGPT, cómo se clasifican y qué tan fáciles son de descubrir, creando así una economía de aplicaciones similar a la de Google o Apple. La incorporación de estas aplicaciones en ChatGPT se está implementando desde hoy para todos los usuarios, excepto en la Unión Europea, y se espera que durante el año se amplíe la lista de socios, además de permitir que los desarrolladores creen sus propias aplicaciones mediante un SDK.

Por ahora, OpenAI no ha detallado cómo los desarrolladores monetizarán este ecosistema, aunque se anticipa la implementación de un modelo de ingresos. Para usar estas nuevas aplicaciones, los usuarios deben otorgar permisos y conectar sus cuentas, haciendo las interacciones más personalizadas y adaptadas a sus necesidades.

En definitiva, si esta visión de OpenAI se consolida, hoy se marca un antes y un después en la historia de la inteligencia artificial, que pasa de ser un simple servicio a convertirse en una tienda en la que las acciones se realizan de manera automática y contextualizada, enriqueciendo significativamente la experiencia del usuario.