El uso de palabras propias de la inteligencia artificial se incorpora cada vez más en las conversaciones cotidianas, según un estudio universitario

Un estudio revela cómo la influencia de la inteligencia artificial está transformando nuestro vocabulario y estilo en conversaciones diarias.

Una reciente investigación de la Universidad Estatal de Florida ha revelado un cambio interesante en el uso del lenguaje en conversaciones cotidianas. Aunque existen preocupaciones sobre cómo la inteligencia artificial (IA) imita el habla y la escritura humanas, el estudio encuentra que las personas están incorporando cada vez más palabras propias de los chatbots de IA en sus conversaciones informales. Términos como «garner» (obtener), «delinear», «intrincado» y «subrayar» aparecen con mayor frecuencia en diálogos relacionados con ciencia y tecnología, como si fueran nuevas expresiones de moda.

El análisis del estudio, que examinó más de 22 millones de palabras en podcasts de ciencia y tecnología realizados de forma improvisada, muestra que la influencia de la IA está moldeando no solo los temas que tratamos, sino también la manera en que estructuramos las oraciones y seleccionamos el vocabulario. Desde la conducta de formar frases hasta la preferencia por términos formales y técnicos, se observa una tendencia clara desde el lanzamiento de ChatGPT en 2022. Destaca que palabras como «underscore» en lugar de «resaltar» o «delve» en lugar de «explorar» se usan con mucha más frecuencia que en años anteriores.

Lo que resulta particularmente notable es que las personas tienden a preferir términos específicos asociados con el estilo de los chatbots, en lugar de usar sinónimos más simples o cotidianos. Esto sugiere que están adoptando ciertos «tics» estilísticos de la IA, similares a cómo un niño empieza a usar palabras que escucha en su entorno, solo que en este caso, adultos imitan la forma en que los modelos de lenguaje generan texto.

Este fenómeno también se ha observado en comunidades académicas, lo que indica que no se limita al ámbito informal, sino que está permeando diferentes niveles del discurso. Si bien muchos consideran que esta tendencia no constituye una crisis, existe la preocupación de que podría acelerar la evolución del lenguaje de manera que cambie nuestra forma de pensar y conceptualizar ideas.

Históricamente, los cambios en el lenguaje han ocurrido con la llegada de nuevas tecnologías, como los mensajes de texto con abreviaturas y emojis, o las redes sociales con hashtags y gifs. Sin embargo, los investigadores advierten que la influencia de la IA podría ser más significativa, pues estas expresiones tienden a sustituir un vocabulario más expresivo y variado, llevando a una forma de hablar más homogénea y monótona.

Aunque por ahora no se trata de una «crisis lingüística», los expertos sugieren que en el futuro estas formas de comunicación podrían afectar cómo conceptualizamos y tomamos decisiones, en parte por la manera en que la IA influye en nuestra forma de expresar ideas. La comunidad investigadora planea profundizar en estos resultados para entender la magnitud de este impacto y determinar si representan un punto de inflexión en la evolución del lenguaje.