Tesla rechaza la implementación de un convenio colectivo en su planta de Grünheide y mantiene sus políticas salariales
Tesla en Alemania se opone a un convenio colectivo, manteniendo su política salarial y rechazando propuestas que podrían afectar su competitividad.
El fabricante estadounidense de coches eléctricos Tesla, ubicado en Grünheide, cerca de Berlín, ha rechazado categóricamente la introducción de un convenio colectivo de trabajo en su planta. Según informó el director de la fábrica, André Thierig, la compañía no contempla la implementación de un acuerdo salarial formal, destacando que en lo que va del año la empresa aumentó los salarios en un 4%, lo que representa la duplicación del incremento salarial en menos de cuatro años desde el inicio de producción, sumando más del 25% en ese período.
Thierig explicó que, debido a la situación económica diferente a la de otras industrias en Alemania, Tesla logró incrementar los salarios en mayor medida que el acuerdo vigente en el sector automotriz, criticando a la vez que el sindicato IG Metall, que lucha por un convenio, argumenta que los salarios en Tesla están por debajo de los de otras fábricas y que la equiparación con categorías salariales mínimas no se aplica en todos los talleres de la planta.
Por otro lado, la visión sindical busca establecer un salario pactado y justo para el personal, que también logró en 2024 una compensación única de 600 €. Además, en 2025 y 2026, se acordaron aumentos en los salarios mensuales del 2,0% y 3,1%, respectivamente. La confrontación entre IG Metall y Tesla permanece activa, evidenciada por esta disputa por la revisión de los salarios y condiciones laborales.
Respecto a las condiciones laborales, Thierig rechazó también la propuesta de reducir la jornada laboral a 35 horas semanales, calificándola como una línea roja que la empresa no está dispuesta a sobrepasar, ya que considera que ello podría poner en riesgo la competitividad del centro de producción.
Asimismo, en 2026 se realizará una importante elección de consejo de empresa que el director calificó de decisiva para el futuro del centro. Aunque en la elección de 2024 la mayoría de los delegados sindicales de IG Metall fue mayoritaria, no lograron la mayoría absoluta, y el resultado se interpreta como un indicador que puede influir en la expansión y autonomía de Tesla en Alemania. Desde la dirección, el resultado de dicha elección se vincula directamente con la continuidad del éxito y la flexibilidad de la planta, así como con la voluntad de expandirse en el país.