AMD firma acuerdo con OpenAI para suministrar GPUs en una estratégica competencia con Nvidia en el mercado de chips para inteligencia artificial
AMD busca desafiar a Nvidia en el mercado de chips para inteligencia artificial, firmando un acuerdo estratégico con OpenAI que podría cambiar el sector.
En la década de 1990, cuando Intel dominaba el mercado de chips para PC, la fabricante de semiconductores necesitaba que Advanced Micro Devices (AMD) existiera como un competidor viable en segundo lugar para evitar acusaciones de monopolio. Casi tres décadas después, AMD podría estar jugando un papel similar para Nvidia, que controla más del 90% del mercado de unidades de procesamiento gráfico (GPU) utilizadas en cargas de trabajo de inteligencia artificial (IA).
El pasado lunes, AMD anunció un acuerdo que implica la venta de miles de millones de dólares en GPUs a OpenAI, situándose como un rival serio en el mercado en rápido crecimiento de chips para IA. Los analistas señalan que Nvidia mantiene casi un monopolio en este sector, con AMD obteniendo apenas una participación de mercado de cifras bajas, en un mercado valorado en aproximadamente 250.000 millones de dólares. Hasta ahora, Nvidia y OpenAI han definido la nueva era de la IA, con las ventas de GPUs de Nvidia elevando su valoración bursátil a 4,5 billones de dólares, y la valoración privada de OpenAI alcanzando los 500.000 millones, impulsada por la popularidad de ChatGPT y los ambiciosos planes de expansión de sus centros de datos.
Mientras tanto, AMD, que anteriormente era una gran promesa en IA, ha visto un rally en su acción bursátil, subiendo un 24% en un solo día, su mayor incremento desde 2002, y un aumento total del 89% en lo que va del año, en comparación con el 40% de Nvidia. El acuerdo entre AMD y OpenAI, que aportará “dólares considerados en decenas de miles de millones” en ingresos a partir del segundo semestre de 2024, también contempla que OpenAI podría poseer hasta el 10% de AMD si las acciones alcanzan ciertos objetivos de precio en los próximos años. La CEO de AMD, Lisa Su, describió este acuerdo como una “victoria para ambas partes” y subrayó que demuestra que sus GPUs son competitivas en rendimiento y precio frente a las de Nvidia.
Por su parte, el CEO de Nvidia, Jensen Huang, reaccionó calificando el acuerdo como “único y sorprendente”, y expresó su curiosidad por la participación del 10% de OpenAI en AMD antes incluso de que la compañía superara ciertos hitos de producción. Este pacto también permite a OpenAI demostrar que sus contratos con diferentes proveedores, como Nvidia y AMD, no son exclusivos, lo que podría evitar implicaciones antitrust. Expertos y analistas indican que, aunque los reguladores aún no han intervenido formalmente, existen preocupaciones respecto a prácticas anticompetitivas y tarifas, además de que las tensiones también giran en torno a las restricciones para exportar tecnología a China, un centro clave para la investigación en IA.
El acuerdo llega en medio de una serie de políticas y tensiones políticas en Washington. Aunque la Administración Trump introdujo exenciones para las empresas que invierten en EE.UU., aún persisten dudas sobre qué proyectos califican, y algunos analistas consideran que inversiones como la de OpenAI en AMD podrían beneficiar la competitividad tecnológica estadounidense. Además, la relación con China sigue siendo un tema clave, con restricciones a ciertos chips y la posibilidad de que importantes inversiones en IA en EE.UU. formen parte de futuras negociaciones bilaterales.
En cuanto a los sistemas que utilizará OpenAI, se anunció que emplearán los sistemas AMD Instinct MI450, que comenzarán a enviarse a partir del próximo año, marcando la primera integración de AMD en un sistema completo de infraestructura para IA más allá de sus chips individuales. Esto posiciona a AMD como una de las pocas compañías en ofrecer una pila completa de tecnologías de hardware para IA, junto a Nvidia. La empresa ha proyectado que el mercado de chips para IA podría valer hasta 500.000 millones de dólares en 2028, y estima que con su participación en este mercado podría obtener una parte significativa, llegando a captar entre el 15% y el 20% en los próximos años.
Mientras tanto, los expertos advierten que la batalla en el sector, particularmente en EE.UU., aún está en fases tempranas y se extenderá durante años. La dinámica actual recuerda a la época en que Intel dominaba el mercado antes de que AMD lograra una recuperación significativa. La preocupación principal radica en que, con regulaciones y tensiones comerciales en juego, el equilibrio competitivo podría alterarse en el futuro cercano, redefiniendo quién lidera verdaderamente en la era de la inteligencia artificial.