Google enfrenta posible venta forzada de Chrome en proceso antimonopolio en Estados Unidos
Google podría verse obligado a vender su navegador Chrome tras un proceso judicial que involucra a importantes actores del mercado tecnológico.
Actualmente, en un proceso judicial antimonopolio en Estados Unidos, Google enfrenta una amenaza que podría cambiar el futuro de su navegador Chrome. El tribunal estaría considerando ordenar la venta forzosa de este navegador, que domina el mercado y es una pieza clave en su ecosistema digital. Como parte de este proceso, la startup de inteligencia artificial Perplexity ha presentado una oferta de 34.500 millones de dólares para comprar Chrome, superando ampliamente el valor actual de la empresa y mostrando su interés en el mercado de navegadores.
Perplexity, valorada en aproximadamente 18.000 millones de dólares y respaldada por varios inversores, busca mantener el desarrollo y soporte del proyecto Chromium, en el que se basa Chrome. La firma propone que, tras la adquisición, Chromium continúe en desarrollo y soporte, y que Chrome siga utilizando Google como motor de búsqueda predeterminado, algo que se acordaría con los reguladores si la compra se concreta.
En paralelo, OpenAI también ha mostrado interés en adquirir Chrome en caso de que la venta forzosa se lleve a cabo, con el objetivo de resolver uno de sus mayores desafíos: la expansión de su inteligencia artificial. El interés de estos otros posibles compradores refleja la relevancia del navegador en el mercado, cuyo valor estimado oscila entre 20.000 y 50.000 millones de dólares, y que actualmente monopoliza más del 60% del mercado mediante Chrome y otros navegadores basados en Chromium.
Para financiar la compra, Perplexity ha asegurado la colaboración de varios fondos de capital riesgo que respaldan la oferta en su totalidad. La empresa indicó en una carta a Sundar Pichai, CEO de Google y su matriz Alphabet, que la propuesta busca cumplir con una medida antimonopolio al entregar Chrome a un operador competente e independiente, en línea con los intereses públicos. Hasta ahora, Google no ha mostrado interés en vender Chrome ni ha respondido públicamente a la oferta de Perplexity.
El proceso judicial, en el que Google ha mostrado interés en mantener el silencio, se encuentra en su fase decisiva, con una resolución prevista para agosto de 2024. Aunque los expertos consideran improbable que el tribunal ordene la venta del navegador, la posibilidad sigue abierta, y Google podría apelar la decisión si esta implicara una venta forzosa.
En el contexto actual, la decisión del tribunal podría tener importantes repercusiones no solo para Chrome, sino también para el futuro del mercado de navegadores y la competencia en tecnología de búsqueda e inteligencia artificial. La historia continúa desarrollándose, y todo apunta a que en los próximos meses se decidirá si el navegador líder cambiará de manos como parte de las medidas regulatorias contra prácticas antimonopolio.