Google proyecta duplicar cada seis meses su capacidad de cómputo para sostener la expansión de la inteligencia artificial

Google planea duplicar su capacidad de cómputo cada seis meses para liderar la innovación en inteligencia artificial.

Google ha enfatizado la necesidad de duplicar su capacidad de cómputo cada seis meses para satisfacer la creciente demanda de servicios de inteligencia artificial (IA). Durante una reunión general el 6 de noviembre, Amin Vahdat, vicepresidente de Google Cloud, destacó que la meta es lograr un aumento de mil veces en capacidad en un periodo de cuatro a cinco años, lo que anticipa una expansión exponencial en la infraestructura necesaria para mantener el ritmo de innovación en IA.

Este impulso en infraestructura coincide con una inversión global significativa en el sector, ya que gigantes tecnológicos como Google, Microsoft, Amazon y Meta planean gastar más de 380.000 millones de dólares en capacidad relacionada con IA durante 2023. Google, en particular, reportó un crecimiento del 34% en los ingresos de su negocio en la nube en el último trimestre, alcanzando una cartera de pedidos de 155.000 millones de dólares, lo que reafirma su compromiso de seguir invirtiendo para consolidar su liderazgo en el mercado.

Para avanzar en su estrategia, Google ha lanzado su séptima generación de unidades de procesamiento tensorial (TPU), llamada Ironwood, que es casi 30 veces más eficiente en términos energéticos que su primera versión, lanzada en 2018. Vahdat explicó que la compañía busca entregar la capacidad necesaria para manejar 1.000 veces más poder computacional, almacenamiento y redes, manteniendo los costes, la energía y el rendimiento en niveles sostenibles mediante modelos más eficientes y silicio personalizado.

Sundar Pichai, CEO de Alphabet, advirtió que 2026 será un año clave marcado por una competencia intensa en IA y una fuerte presión para satisfacer la demanda en la nube y el cómputo. En ese contexto, el ejecutivo reconoció las preocupaciones sobre una posible burbuja en IA, tema que ha resonado en Silicon Valley y Wall Street. Sin embargo, defendió las inversiones agresivas de la compañía, resaltando que la demanda en sus negocios de nube ha sido sólida, con crecimiento anual del 34% y una cantidad de pedidos pendientes que alcanzan los 155.000 millones de dólares.

Pichai también mencionó que la capacidad de suministro es actualmente un cuello de botella, ejemplificando con el lanzamiento de su modelo de IA Gemini 3, que busca ofrecer respuestas más precisas y complejas. La compañía está en una carrera con OpenAI para distribuir sus herramientas de IA a la mayor cantidad de usuarios posible, pero enfrenta limitaciones en la infraestructura para ampliar su alcance.

Mientras tanto, el mercado ha expresado cierta cautela con caídas en acciones de empresas relacionadas con IA, reflejando la incertidumbre sobre el mercado y las valoraciones. Nvidia, uno de los principales actores del sector, señaló que no considera que exista una burbuja, y reportó un crecimiento del 62% en sus ingresos en el último trimestre. Pichai advirtió que, en caso de que la burbuja estalle, ninguna compañía sería inmune, incluyendo Google.

En definitiva, Google continúa apostando por una inversión agresiva en infraestructura y en modelos de IA cada vez más eficientes, con el objetivo de mantener su liderazgo en un mercado que promete una transformación profunda en los próximos años. La compañía busca lograr una escala sin precedentes sin perder de vista la sostenibilidad y la rentabilidad a largo plazo.