Nvidia niega la existencia de puertas traseras en sus GPUs para centros de datos tras acusaciones de China
Nvidia rechaza las acusaciones chinas sobre presuntas funciones de seguridad remota en sus GPUs y refuerza su compromiso con la ciberseguridad global.
Nvidia rechazó las acusaciones de China sobre sus GPUs para centros de datos destinados a inteligencia artificial, que supuestamente incluirían una función de hardware capaz de desactivar remotamente los chips, conocida como «interruptor de apagado» o «kill switch». En un comentario publicado en su blog, el director de Seguridad de Nvidia, David Reber, afirmó que sus GPUs no contienen ni deberían tener puertas traseras ni interruptores de apagado remotos: «Las GPUs de Nvidia no y no deberían tener puertas traseras ni backdoors», aseguró Reber.
Esta declaración surge después de que la Administración del Ciberespacio de China solicitara a Nvidia documentos relacionados con lo que denominaron vulnerabilidades de seguridad en su chip H20, dirigido al mercado chino. La agencia mencionó específicamente riesgos asociados con «puertas traseras». La situación refleja cómo Nvidia navega en un contexto geopolítico complejo, dado que sus componentes siguen siendo muy demandados por países y empresas en todo el mundo.
En respuesta a estas tensiones, Estados Unidos impuso controles de exportación a ciertos chips de Nvidia con destino a China, alegando motivos de seguridad nacional debido a posibles usos militares o ventajas en inteligencia artificial por parte del país asiático. La medida causó una prohibición temporal en abril, aunque en julio la Administración Trump levantó esas restricciones mediante una exención. La prohibición afectó aproximadamente a 8.000 millones $ en ventas potenciales para Nvidia, evidenciando el impacto económico de estas medidas.
El CEO de Nvidia, Jensen Huang, ha expresado que preferiría que los chips de Nvidia se conviertan en el estándar mundial para la computación AI, especialmente entre desarrolladores chinos. Aunque el chip H20 genera miles de millones en ingresos trimestrales, la prohibición de exportación en China supuso una pérdida significativa en las proyecciones de ventas de la compañía.
Expertos en tecnología y seguridad de Silicon Valley coinciden en que las funciones que permiten control remoto o puertas traseras en dispositivos representan vulnerabilidades peligrosas, susceptibles de ser explotadas por hackers o gobiernos hostiles. Nvidia ha argumentado que las puertas traseras secretas serían vulnerabilidades graves que podrían ser utilizadas por atacantes y que, además, vulneran los principios fundamentales de ciberseguridad. Reber añadió que, en caso de existir un interruptor de apagado en los productos, sería una falla permanente que pondría en riesgo la seguridad nacional de EE. UU., comparándolo con comprar un coche con un control remoto para el freno de estacionamiento, «por si deciden que no debes seguir conduciendo».