Reino Unido y OpenAI acuerdan almacenar datos en servidores locales para reforzar la soberanía en inteligencia artificial
El Reino Unido y OpenAI inauguran una nueva etapa en la gestión de datos, priorizando soberanía, seguridad y cumplimiento de normativas internacionales.
El Gobierno del Reino Unido ha anunciado un acuerdo con OpenAI para ampliar la capacidad soberana de inteligencia artificial (IA) del país, con el objetivo de fortalecer la seguridad y la protección de los datos de sus usuarios. A partir del 24 de octubre de 2025, tanto clientes como desarrolladores británicos podrán almacenar sus datos en servidores ubicados en el Reino Unido, cumpliendo con leyes de protección de datos como el RGPD, que impone requisitos mucho más estrictos que los existentes en Estados Unidos.
Esta decisión representa una mejora importante para muchas empresas en el Reino Unido, que actualmente enfrentan incertidumbre sobre la ubicación de sus datos y la falta de soberanía en el almacenamiento. La opción de almacenamiento local ayudará a cumplir con estándares más rigurosos y a resolver preocupaciones relacionadas con la ubicación de los datos en EE.UU., fortaleciendo así la confianza en la gestión de la información.
En el nuevo espacio de trabajo de ChatGPT, los contenidos —incluidos archivos, conversaciones y funciones como generación de imágenes y análisis de datos— se almacenarán en la región seleccionada cuando estén en reposo. Sin embargo, algunos datos, como metadatos, servicios de terceros y procesos transitorios necesarios para el funcionamiento del servicio, podrían almacenarse fuera del área elegida.
Este acuerdo forma parte del plan de acción del Gobierno en materia de IA, que también incluye la incorporación de ChatGPT para el personal del Ministerio de Justicia, beneficiando a 2.500 empleados con acceso a ChatGPT Enterprise. Según informó Sam Altman, CEO de OpenAI, el uso de sus productos en el Reino Unido se ha multiplicado por cuatro en el último año, reflejando un creciente interés en aprovechar la IA para mejorar la eficiencia y la innovación en los servicios públicos y las empresas privadas.
El Gobierno británico ya ha puesto en marcha amplios planes para integrar la IA en el sector público, complementados por una inversión privada de 14.000 millones de libras, con el objetivo de posicionar al Reino Unido como líder mundial en el mercado de IA, tanto para consumidores como para empresas.