El sector tecnológico reduce su plantilla en medio de altas inversiones en inteligencia artificial y un entorno económico incierto
Las gigantes tecnológicas ajustan sus plantillas ante la inversión en inteligencia artificial y la incertidumbre económica global.
El sector tecnológico continúa enfrentando una reducción de personal en un entorno económico incierto y con fuertes inversiones en infraestructura de inteligencia artificial (IA). Google, por ejemplo, ha extendido esta semana ofertas de retiro voluntario a más empleados, en una medida adicional a los despidos que muchas empresas están realizando para disminuir costes. Se estima que en 2025 el sector ha anunciado cerca de 75.000 despidos hasta finales de mayo, superando los aproximadamente 55.000 registrados en el mismo período de 2024, según un informe de Challenger, Gray & Christmas. Solo en los últimos dos meses, Microsoft busca reducir un 3% de su plantilla global, lo que equivale a aproximadamente 7.000 puestos de trabajo, y Amazon eliminó unos 100 puestos en su unidad de dispositivos y servicios. Por su parte, Intel planea recortar un 20% de su fuerza laboral en 2025, en un esfuerzo por virar su estrategia y mejorar sus resultados financieros.
Expertos señalan que estas reducciones están estrechamente relacionadas con las altas inversiones en infraestructura de IA que realizan grandes tecnológicas como Microsoft y Alphabet. La compañía de Bill Gates planea gastar unos 80.000 millones de dólares en inversiones de capital este año, lo que, según analistas como Gil Luria de D.A. Davidson, podría implicar la pérdida de hasta 10.000 puestos de trabajo anuales si persisten los niveles actuales de inversión. La mayor inversión en IA genera presión adicional sobre los márgenes de ganancia, llevando a las empresas a mantener menos personal o a reducir su plantilla, además de facilitar la operación con equipos de desarrollo menores gracias a los avances tecnológicos.
Si bien Microsoft y Google, matriz de Alphabet, parecen estar mejor preparados para resistir las incertidumbres relacionadas con las tarifas y las políticas comerciales cambiantes, los analistas advierten que las preocupaciones económicas aún podrían restringir la demanda en el sector. La combinación de estos factores ha llevado a un escenario en el que las empresas tecnológicas revisan sus estrategias de personal, priorizando inversiones en IA y adoptando medidas de ajuste que incluyen despidos y reducción de contrataciones, en un contexto donde la inversión en innovación se mantiene como una prioridad que, sin embargo, afecta a la fuerza laboral.