Tesla inicia pruebas de su robotaxi en Austin, consolidando su presencia en el mercado de vehículos autónomos
Tesla comienza en Austin con pruebas de robotaxis, enfrentando a competidores y aprovechando un entorno favorable para la innovación en vehículos autónomos.

El mercado de los robotaxis está en plena expansión y Austin, Texas, se ha consolidado como uno de los principales epicentros para el desarrollo y prueba de vehículos autónomos. Tesla, uno de los actores más esperados, anunció que próximamente lanzará en la ciudad su servicio de robotaxis con una flota inicial de 10 vehículos Model Y sin conductores a bordo, con planes de ampliar su operación a miles de unidades y expandirse a más ciudades si la fase de pruebas resulta exitosa. El CEO Elon Musk afirmó que el despliegue en Austin será el punto de partida para una estrategia a mayor escala, luego de varias semanas de pruebas en la capital texana.
Establecida en un entorno que favorece la innovación, Tesla competirá en un mercado donde ya operan varias empresas como Waymo, Zoox, ADMT y Avride, que aprovechan la regulación favorable y el talento tecnológico local para testar sus vehículos en las calles de Austin. La ciudad, además de contar con una infraestructura adecuada y un diseño vial con calles anchas y semáforos horizontales que facilitan el mapeo y la navegación, tiene un marco regulatorio que prohíbe a los municipios modificar o regular de forma específica los vehículos autónomos desde 2017, permitiendo que las operaciones se realicen bajo requisitos similares a los de los vehículos tradicionales.
Entre las empresas que ya operan en Austin, Waymo, filial de Alphabet, lidera las pruebas con un programa de viajes en colaboración con Uber desde marzo. Zoox, por su parte, inició pruebas en la ciudad en 2022 y ADMT, estrechamente vinculada a Volkswagen, prueba vehículos eléctricos desde 2023. Además, la startup local Avride, con sede en Austin, ha puesto en marcha una flota de vehículos autónomos y robots de entrega, con planes de comenzar a ofrecer servicios de robotaxi remunerados más adelante este año y ampliar su presencia en Dallas en 2025 vía Uber.
Tesla basa su tecnología en sistemas de cámaras y visión por computadora, a diferencia de Waymo, que emplea sensores avanzados como lidar y radar. Elon Musk ha prometido que su enfoque «generalizado» será más económico y ambicioso en comparación con las sofisticadas tecnologías de la competencia. Sin embargo, la industria reconoce que las pruebas en Austin se benefician de un entorno regulatorio más flexible, lo que ha acelerado la innovación y la entrada al mercado de nuevos actores.
La legislación de Texas respalda la operación de vehículos autónomos, exigiendo que cumplan con los mismos requisitos de seguridad, seguro y registro que los automóviles convencionales, además de contar con sistemas que graben datos en caso de incidentes. La autoridad estatal trabaja constantemente en la creación de un marco regulatorio claro, con un grupo de trabajo especializado y el apoyo de empresas como Waymo, que ha establecido buena relación con las autoridades locales y ha realizado pruebas en la ciudad desde 2015, incluso antes de suspender operaciones en 2019 para enfocarse en Phoenix y reaparecer en Austin en 2023.
El interés de las compañías en Texas no solo se centra en la regulación, sino también en la accesibilidad y el talento local en IA y robótica. Universidades como la de Texas en Austin han sido pioneras, con proyectos de investigación que han contribuido al avance mundial en vehículos autónomos. Además, el estado ha recibido solicitudes de otras urbes internacionales que ven en Texas un modelo para gestionar los desafíos y oportunidades de los vehículos sin conductor.
A pesar del entusiasmo y los avances, la industria también enfrenta críticas y desafíos. Incidentes de seguridad, como frenadas abruptas o problemas en la interacción con usuarios, generan preocupación sobre la percepción pública y la regulación futura. Sin embargo, expertos aseguran que la meta debe ser superar los estándares humanos y enfocarse en reducir accidentes, resaltando que muchas muertes en carretera permanecen sin atención mediática. En este contexto, las empresas continúan perfeccionando sus sistemas y colaborando con emergencias y autoridades para garantizar una integración segura de los vehículos autónomos en las ciudades.