Bitcoin cae tras intento de destitución de la gobernadora de la Fed, Cook, por parte de Trump y genera incertidumbre en los mercados
Bitcoin reaccionó con caída y volatilidad ante la controvertida destitución de una autoridad clave de la Reserva Federal por parte de Trump, generando incertidumbre en los mercados.
El lunes por la noche, Bitcoin reaccionó rápidamente tras el anuncio del presidente Donald Trump de destituir a la gobernadora de la Reserva Federal, Lisa D. Cook, con efecto inmediato. La medida se basa en la cláusula de «por causa» de la Ley de la Reserva Federal y se justifica por supuestas declaraciones falsas en solicitudes de hipotecas en 2021. Sin embargo, Cook rechazó la destitución, afirmó que no renunciará y ha contratado asesoría legal, preparando un conflicto legal sin precedentes sobre el poder presidencial y la independencia de la Reserva Federal.
Cook, que fue nominada por el presidente Biden y reconfirmada en 2023 para un mandato hasta 2038, posee un voto permanente en el FOMC como miembro de la Junta de Gobernadores. La noticia impactó inmediatamente en los mercados internacionales, con Bitcoin cayendo aproximadamente un 2,4%, cotizando en torno a los $110.137, tras un mínimo intradía de $108.666. Los mercados también reflejaron incertidumbre en el dólar y en la curva de tasas de interés en Estados Unidos, mostrando que la percepción sobre la independencia de la Fed podría erosionarse.
Este movimiento legal tiene enormes implicaciones. La acusación de Trump, que afirma que Cook incurrió en conductas engañosas y posiblemente criminales en un asunto financiero, plantea una disputa legal que podría llegar incluso a la Corte Suprema, dado que la ley 12 U.S.C. § 242 permite la remoción «por causa» pero no especifica claramente los términos, siendo generalmente interpretada en casos de mala conducta en el cargo y no por asuntos personales previos a su nombramiento. Hasta la fecha, ningún presidente había intentado remover a un gobernador en funciones, lo que hace que la situación sea sin precedentes.
Por su parte, la abogada de Cook, Abbe Lowell, calificó la acción de ilegal, y la gobernadora anunció que continuará ejerciendo sus funciones. Algunos analistas de mercado consideran que esta tensión podría impulsar una expansión del poder presidencial sobre la Reserva Federal, permitiendo al presidente influir en futuras nominaciones a la junta y favoreciendo una política monetaria más laxa. Esto, a su vez, favorecería un dólar débil y una mayor inflación de activos reales y criptomonedas.
Expertos del ámbito macroeconómico y financiero indican que, a corto plazo, este episodio generará volatilidad y posible descenso en los índices bursátiles, pero a largo plazo podría fortalecer posiciones en activos como el oro y Bitcoin. La narrativa de que el presidente busca influir más en la política monetaria, incluso mediante la incorporación de más miembros favorables, refuerza la hipótesis de que en el futuro cercano se podría experimentar una mayor «dominación fiscal» y un debilitamiento del dólar, favoreciendo una tendencia alcista en los activos reales y criptomonedas como Bitcoin.
Asimismo, se observa una reacción en los mercados de divisas y bonos, con un debilitamiento del dólar y una curva de intereses en Estados Unidos que se acentúa en forma de «bear-steepening», en medio de temores de que la independencia de la Fed pueda deteriorarse y de que las expectativas de recortes en tasas de interés cambien. La tensión también aumenta las especulaciones sobre un posible avance de Trump en la conformación del consejo de gobernadores, lo que podría alterar la política monetaria y la percepción del mercado sobre la estabilidad institucional en Estados Unidos.
De cara al futuro, el mercado puso atención en cómo el entorno político y las decisiones sobre la autoridad de la Reserva Federal influirán en los precios de Bitcoin y otros activos. La complejidad del escenario, sumada al posible fortalecimiento del poder presidencial, sugiere un panorama en el que las criptomonedas y los activos de refugio podrían beneficiarse si se consolida una política con menor independencia del banco central estadounidense, impulsando así la acumulación de «hard assets» y la búsqueda de protección frente a una posible devaluación y expansión fiscal desmedida.